“Bitcoin hará a los bancos lo que el correo electrónico hizo a la industria postal”. Rick Falkvinge.
Los números no mienten: cómo ha impactado el Bitcoin en el mundo y hacia dónde se dirige
El Bitcoin es una criptodivisa que puede utilizarse para comprar cualquier bien o servicio allí donde se acepte. Es una moneda digital libre y descentralizada que permite realizar transacciones sin necesidad de intermediarios. Utiliza una tecnología peer-to-peer, que reduce la transacción a las partes implicadas que envían y reciben Bitcoins a través de un monedero digital o wallet que tiene una dirección Bitcoin, similar a una cuenta bancaria pero libre de cualquier tipo de control o burocracia. Los mineros se encargan de confirmar estas transacciones a través de la "Prueba de Trabajo".
El creador de Bitcoin, Satoshi Nakamoto, publicó el libro blanco del mismo en 2008. El primer Bitcoin fue creado en 2009 por un desconocido con el alias de Satoshi Nakamoto. En 2013, a medida que más gente se dedicaba a la minería, empezaron a aparecer otras criptodivisas como Litecoin y Peercoin. A medida que más gente empezó a minar, se necesitaron ordenadores más potentes para resolver problemas matemáticos complejos y resolver estos bloques de información conocidos como "Hashes".
Hay algunas características clave que hacen de Bitcoin una moneda única, y su modelo ha sido replicado por otras criptodivisas existentes, aunque con algunas diferencias a las de esta criptodivisa:
La oferta monetaria está limitada a 21 millones de tokens, que se reducen al 50% en los halvings que se producen cada cuatro años reduciendo la recompensa para los mineros. Esto significa que sólo hay un número determinado de Bitcoins en circulación. El número de monedas es fijo y no puede modificarse.
Las transacciones validadas no pueden ser prohibidas ni censuradas. Quedan registradas en el blockchain en un libro de contabilidad abierto y pueden ser verificadas por cualquiera en cualquier momento.
Se crea con un código abierto, lo que significa que cualquiera puede revisarlo y sugerir cambios si así lo desea. Esto permite que los usuarios confíen en que saben en qué se meten cuando usan Bitcoin porque pueden ver exactamente cómo funciona.
Es accesible para todos los usuarios del mundo siempre que tengan acceso a la conectividad a Internet a través de sus teléfonos u ordenadores; ¡no es necesario identificarse antes de utilizarlos! ¡No se necesita ningún tipo de documento de identidad ni pasaporte ni número de la seguridad social ni nada por el estilo! Sólo necesitas una dirección de correo electrónico.
La minería de Bitcoin es el proceso por el cual las transacciones en la red de Bitcoin se confirman y se añaden al libro de contabilidad público, conocido como blockchain. La minería también sirve para asegurar la red, así como para confirmar al resto de la red que las transacciones han tenido lugar.
La forma de resolución es a través de un problema matemático, que necesita de potentes ordenadores para poder resolverlo. Una vez confirmada, la transacción se añade a los bloques de la blockchain.
Esto también sirve para dar seguridad a la red. Algunos nodos, llamados nodos completos, son una especie de "estación" de software que almacena una copia de la blockchain, donde se registran todas las transacciones, y éstas sólo se validan cuando aparecen en cada una de estas copias, lo que garantiza su legitimidad.
La criptomoneda Bitcoin es un gran avance en el comercio electrónico. Permite a los usuarios enviar y recibir dinero sin necesidad de una entidad bancaria, eliminando tasas o comisiones.
Para comprar Bitcoins se necesita un monedero digital o wallet para poder transferirlos desde el usuario del Exchange a su monedero a través de las claves públicas y privadas que éste proporciona:
Abrir un usuario en un Exchange que permita realizar transacciones de criptodivisas.
Conecta tu monedero a él.
Compra Bitcoins y transfiérelos a tu monedero o déjalos dentro del usuario del Exchange.
Con estos sencillos pasos tendrás acceso a tus Bitcoins desde cualquier dispositivo móvil u ordenador utilizándolos en cualquier parte del mundo. Sin embargo, no todo es como lo muestran en el mercado o las voces de los expertos.
El mercado de las criptomonedas se estremece
Desde el pasado 4 de mayo, el bitcoin ha perdido un 32% de su valor, y sólo ha moderado la caída sufrida por el desplome de la criptodivisa TerraUSD.
Esta inminente caída fue de casi un 6% a primera hora de la mañana del jueves, alcanzando los 26.755 dólares. Sin embargo, a mediodía había cedido un 3,3% y alcanzaba los 27.461 dólares, según datos del mercado.
Aun así, el bitcoin no es la única moneda digital que sufre caídas. Ethereum, que es la segunda criptodivisa más utilizada, se ha desplomado en la apertura de esta jornada un 16% hasta los 1.916,58 dólares. Este mediodía se ha recuperado, perdiendo algo más del 7%. Sin embargo, en un año las pérdidas han ascendido a cerca del 49%.
La reciente caída del precio de las criptodivisas no es la primera vez que el Bitcoin retrocede. Lo hemos visto bajar antes, en 2008, 2011, 2013, 2018... y cada vez ha alcanzado nuevas cotas.
Así que, aunque pueda parecer contraintuitivo comprar en un mercado a la baja, es importante recordar que no es un fenómeno sin precedentes. Una de las estrategias de inversión clásicas es comprar cuando hay "sangre en las calles" (o, en este caso, lágrimas en los ojos porque estás viendo cómo se desploman tus criptomonedas).
Esta estrategia se puede parafrasear con el viejo adagio: "Llueve y escampa". No sabemos cuándo empezará a caer el agua ni cuándo se detendrá, y tampoco sabemos cuándo o si las criptodivisas volverán a subir, pero sí sabemos que lo han hecho antes y lo harán de nuevo.
Si quieres invertir en criptodivisas, es importante entender las tendencias del mercado a largo plazo. Desde 2008, ya hemos visto que precios que no estaban en mente han alcanzado niveles muy altos. Pero en algún momento volverá la típica fluctuación y las prisas e ilusiones de una ganancia abrupta pueden llevar a graves errores en el cálculo del capital a invertir.
Por supuesto, si se quiere aprovechar la caída de las criptodivisas y comprar Bitcoin durante su descenso, hay que estudiar el conjunto de indicadores de coyuntura, los datos históricos y las proyecciones del mercado a largo plazo para que surjan oportunidades. Estas pueden ser aumentar nuestras posiciones en el mismo token o diversificar nuestra cartera con otras criptoactivos. También podrían significar convertir parte de ellas en activos más estables como monedas de oro o plata.
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